SIETE DE MAYO.

Con el tiempo te vas dando cuenta de las cosas, de la gente, de los pequeños detalles, y de los grandes momentos. Y te das cuenta que quien te quiere de verdad no pretende cambiarte. Te quiere tal y como eres, aceptando cada uno de tus defectos y virtudes. Te brinda toda la felicidad que un día tu deseaste. Y justamente cuando te das cuenta de que las cosas no pueden ir mejor, aparece él, con su sonrisa esa que parece que cambia tu mundo, que lo pone patas arriba, que cada vez va cayendo poco a poco sobre él. Exactamente en ese momento en el que te das cuenta de que su sonrisa es lo más bonito que has visto, de que sus ojos proyectan un mundo en el que solo tú y él podéis vivir... En ese instante, es cuando te das cuenta de que toda tu vida a cambiado, de que ya nada era como antes, de que ya solo vives por latidos sin sentido que se aceleran cuando hablas con él. Justamente ahí, es cuando te das cuenta de que verdaderamente te has enamorado, de que ya no habrá nadie que te haga sentir como él te hace sentir. NADIE.