Despierto, con un frío tremendo. Miro la hora, las 3 de la mañana. Recuerdo lo que había pasado horas antes, y me miro la mano. La venda estaba completamente manchada, al igual que la sábana. Voy al baño y me curo la herida, y me cambio la venda. Cojo la sábana y la meto en un cesto blanco, y abro un cajón para coger una sábana limpia. Me dispongo a cogerla cuando veo una pequeña bolsa con un pequeño corazón pintado, la cojo y cierro el cajón, la dejo sobre mi mesilla y coloco la sábana sobre la cama. Cojo la bolsa de nuevo, me siento en la cama y saco de la pequeña bolsa un montón de fotos. Todas eran de nosotros, de esas veces que lo pasábamos bien...

Entonces aparece esa foto, la última que nos hicimos juntos, antes de que apareciese ella, y me dijeses todas esas cosas que me dijiste... Sin motivo...